Muchos pueden considerar absurdo que se le denomine terapia al simple hecho de escuchar el canto de las aves, pero dime ¿cuándo fue la última vez que verdaderamente te detuviste y apreciaste el canto de cualquier pájaro?.
Si en verdad realizaste bien esa actividad, entonces podrás afirmar que escuchar la sinfonía de trinos y cantos que se produce especialmente a la mañana constituyen un sonido auténticamente relajante y desestresante. Y justamente esto es lo que se busca con la terapia del sonido, dejar que la mente y el cuerpo se distiendan al ritmo de estas melodías naturales y carguen al organismo con energía positiva.
Desde luego que escuchar los sonidos de las aves no eliminará tus problemas económicos, de trabajo o del tipo que sea que esté estresándote, pero sí permitirá que veas la vida de otra manera, pues su efecto se reduce a un simple impulso del estado de animo, y bien sabes que cuando la vida se encara con un espíritu en positivo y alegre, todo parece resultar más fácil.
Este método resulta fácil y rápido para practicar en tu casa antes de comenzar el día. Ni bien te levantes, llena todas las habitaciones con el rico sonidos del ave que quieras, pues en Internet existen las más variadas grabaciones de cantos ornitológicos que fácilmente podrás escoger y descargar en el formato más indicado.
Esa seria una solución práctica, pero de ningún modo aconsejable ni enteramente positiva. En primer lugar, las terapias del sonido buscan volver a acercar el hombre a la naturaleza, por lo que someter un ave a una jaula no es la mejor forma de lograrlo. En vez de ello, te comento dos opciones que podrías implementar para eliminar el estrés con el canto de las aves.
Verás como tu casa se llena de un ambiente primaveral y más cálido, elevando tu ánimo y haciéndote sentir mucho mejor y con ganas de enfrentar la jornada que te espera. Con una sesión de 5 minutos será suficiente, pero mientras más la prolongues, mejor.